El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, llegó este martes poco antes de las 10.00 horas (8.00 GMT) al Vaticano para la que será su primera reunión como mandatario con el papa Francisco, con quien ya coincidió en otras ocasiones y en la que estará presente la petición de liberar presos políticos.
Díaz-Canel llegó puntual, acompañado de su esposa, Lis Cuesta Peraza, a la plaza del Fungo (Hongo), donde fue recibido por el responsable de la Prefectura de la Casa Pontificia, que se encarga del protocolo, monseñor Leonardo Sapienza, ya que la reunión se celebrará en el despacho adyacente al aula Pablo VI, donde se celebran los grandes actos en el Vaticano.
Se convierte así en el tercer mandatario cubano que viaja al Vaticano desde el triunfo de la Revolución Cubana en 1959, puesto que sus predecesores, Fidel Castro y su hermano Raúl, lo hicieron, respectivamente, en 1996 y 2015.
El Vaticano informará tras la reunión del tiempo en el que estuvieron reunidos y del intercambio de regalos, así como de los temas tratados posteriormente en la Secretaria de Estado con Pietro Parolin.
La reunión se produce pocos días después del regreso al Vaticano del papa, el pasado viernes, después de nueve días ingresado en el hospital por una operación debido a una hernia abdominal.
Con Raúl Castro, el papa Francisco conversó durante una hora también en esta sala del Aula Pablo VI.
Este será el cuarto contacto entre ambos: el primero fue en marzo de 2013, cuando el mandatario cubano, entonces como primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, asistió a su entronización como papa; en septiembre de 2015, en ocasión de la visita de Francisco a Cuba, y en febrero de 2016, durante el encuentro entre el Sumo Pontífice y el Patriarca de Moscú, Cirilo, en La Habana.
El mandatario llegó este lunes a Roma y la delegación cubana está integrada, además, por el ministro de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla, varios viceministros de esa cartera, y la viceministra primera del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Ana Teresita González Fraga, entre otros directivos.
Aunque se desconocen los asuntos que se van a tratar en este encuentro, un tema que tienen pendiente ambas partes es el de los detenidos y condenados en las mayores protestas antigubernamentales de Cuba en décadas, en su mayor parte pacíficas y espontáneas.
El cardenal Beniamino Stella, que visitó Cuba en febrero pasado para conmemorar los 25 años de la visita de Juan Pablo II, explicó entonces que había transmitido el mensaje de Francisco de la liberación de estos presos. EFE