Durante la protesta ante la embajada de Suecia en Bagdad, capital de Irak, los manifestantes distribuyeron panfletos en los que podía leerse en inglés y en árabe: “Nuestra Constitución es el Corán. Nuestro líder, Al Sadr”.
Los manifestantes quemaron banderas arcoíris, símbolo de la comunidad LGTBI, y escribieron “Sí al Corán” en la entrada de la embajada.
No es la primera vez que se registran este tipo de acciones en Suecia y otros países europeos.
En el pasado, algunas de ellas fueron impulsadas por movimientos de extrema derecha, desatando manifestaciones y tensiones diplomáticas.
La protesta se originó a causa de la indignación por la quema de un Corán en Estocolmo.