Han hecho de ese pequeño espacio una casa. Algunas ollas están sobre una mesa, el agua en varias botellas desechadas en el piso, la ropa colgada en la ventana para que se seque, un televisor que está encendido, pero que nadie lo está viendo. Unos cuatro colchones en el piso que son las ‘camas’ donde duermen Saraí Borges Maita, su esposo y sus 10 hijos.
Por Pableysa Ostos/Corresponsalía lapatilla.com
El pasado 18 de junio, un fuerte aguacero provocó el colapso de una parte de la vivienda. Ella vivía en la parte de arriba de esa casa, ubicada en la urbanización Orinoco de Puerto Ordaz, al sur de Venezuela. Desde entonces quedaron damnificados y fueron llevados a un refugio en el colegio Roraima, sector Los Monos, que está a pocos metros de su casa.
Borges afirma que ha contado con el apoyo del consejo comunal y la directora de la institución en la que están viviendo, pero que hasta la fecha no ha recibido ninguna respuesta por parte de los entes gubernamentales sobre el otorgamiento de una casa para establecerse con su familia.
“Durante dos semanas faltó el apoyo que enviaba la gobernación en cuanto alimentos, agua, pero la misma comunidad conversó e hizo las llamadas correspondientes y ya vienen en camino”, aseguró este 25 de julio la afectada.
La hermana de Saraí, Yetsimar Borges, es otra de las afectadas, ya que ella vive en la parte de abajo de la casa.
“En la escuela no podemos vivir, están durmiendo incómodos en el suelo, nos llevan agua cuando se acuerdan y con la comida es un problema”, señaló Yetsimar. Su familia está integrada por seis personas, y actualmente todos comparten una sola habitación en la cual solo hay dos camas. El resto de la casa poco a poco se ha ido cayendo en pedazos.
Yetsimar afirma que dejó el refugio en el que sigue su hermana, debido a que “cumplieron dos veces nada más con la comida, el agua, porque no hay ni comida, ni agua. Nos llevaron unas comidas con gorgojo, el nieto mío comió de eso y se enfermó. Mi hija embarazada, mi hija que sufre de convulsiones. Entonces, decidimos regresarnos otra vez acá, aunque Protección Civil nos dijo que no podíamos estar aquí”.
Piden ayuda
Anselmo Vivas es el dueño de otra vivienda que está afectada. Relató que ahí vivían 8 personas y se vieron en la necesidad de irse a otro sitio. “Vivimos alquilados, tenemos tres habitaciones alquiladas y por cada una pagamos 30 dólares, y estamos costeando esas habitaciones con lo que ganan mis dos hijos”.
Vivas extendió un llamado a las autoridades para que culminen los trabajos antes de que las lluvias terminen de colapsar el lugar. “Que hagan acto de presencia y cumplan antes de que las lluvias se terminen de llevar todo”, sostuvo la propietaria de la vivienda afectada.
Por su parte, Yetsimar Borges señaló: “Ellos nos sacaron de acá por una supuesta mejoría, ¿verdad? Cuando no han cumplido. Este cuarto está que se cae también. Que se cae. Hace tres días llovió, ahí tengo el video, el agua sube hasta aquí, hasta aquí sube el agua”.
“Pedimos que nos den soluciones. Que terminen de hacer las reparaciones que prometieron hacer”, sentenció la mujer.