Un piloto estadounidense fue sancionado por la ley francesa luego de que fue a trabajar ebrio. Tenía que volar desde París hasta Estados Unidos, pero su falta de coordinación motriz lo delató. En consecuencia, las autoridades le quitaron su licencia de pilotaje, le ordenaron prisión y le impusieron una multa económica como reparación del daño.
Por La Nación
El hombre de 63 años, identificado solamente como Henry W., tenía programado un traslado del aeropuerto Charles de Gaulle de París a Dallas, Texas, el domingo, según información del medio francés Le Parisien. No se especificó quién se dio cuenta de que estaba bajo los influjos del alcohol. Sin embargo, lo reportaron ante la policía y fue detenido.
Enseguida, el hombre fue vinculado a un proceso judicial para determinar cuáles eran las sanciones que le correspondían. Como testigos se presentaron algunos de los agentes que participaron en la aprehensión y uno de ellos aseguró que el implicado “se tambaleaba un poco y tenía los ojos vidriosos”, de acuerdo con The Local, otro medio de ese país.
Durante las audiencias, el sujeto trató de defenderse, en la corte dijo que solo había tomado dos copas de vino la noche anterior. No obstante, los oficiales dijeron que mostró “signos de evidente embriaguez”. Además, en los reportes se dijo que Henry tenía 0,132% de alcohol en la sangre, seis veces más del límite legal para pilotos en Europa y tres veces más de lo establecido por la Administración Federal de Aviación en EE.UU. (FAA por sus siglas en inglés).
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