Una patrullera de la Policía fue asesinada este miércoles por sicarios que la sorprendieron y le dispararon en repetidas ocasiones mientras esperaba el cambio de luz en un semáforo en la ciudad de Neiva (sur), asesinato que causó consternación en Colombia.
El ataque ocurrió cuando Paula Cristina Ortega Córdoba, de 28 años, estaba en su motocicleta en una concurrida calle del barrio Calixto Leyva, informó la Policía.
Las autoridades desplegaron una operación y capturaron a los supuestos asesinos que, según el ministro de Defensa, Iván Velásquez, pertenecen al Estado Mayor Central (EMC), la principal disidencia de las FARC.
“La rápida reacción de la Policía de Colombia permitió la captura de los dos homicidas, miembros del EMC, quienes tenían en su poder el arma de dotación que le hurtaron a la patrullera”, escribió Velásquez en redes sociales.
Por su lado, el director general de la Policía colombiana, el general William Salamanca, expresó su solidaridad a la familia de la patrullera asesinada.
Igualmente, dijo que en tiempo récord, resultado de una operación candado que él ordenó desarrollar en Neiva, la capital del departamento del Huila, fueron capturados “dos presuntos responsables” de asesinar a Ortega, quienes “portaban una granada de fragmentación y dos pistolas, incluida la de la víctima”.
Políticos de diferentes sectores al igual que exministros condenaron el asesinato de la Policía y recordaron que dejó una niña de ocho años.
De otro lado, un sargento del Ejército fue asesinado en la población de Dosquebradas, en el departamento de Risaralda (centro).
El militar fue atacado a tiros por hombres que se movilizaban en motocicletas y que al parecer lo perseguían para robarle 45 millones de pesos (unos 11.000 dólares de hoy) que había retirado de un banco.
EFE