“Allí las plagas son como unos elefantes, grandes y negras. Yo estoy asustada. Yo tengo 84 años y estoy asustada, porque un dengue que nos agarre, bueno, a mí si me agarra, con esta edad que tengo no duraré mucho”, comentó Lore Marcano, habitante de la Torre A de los bloques de Unare en Puerto Ordaz.
Pableysa Ostos // Corresponsalía lapatilla.com
La mañana de este lunes 4 de septiembre, varios vecinos decidieron salir a la calle a protestar para exigir que les solventen una problemática de aguas negras que tiene meses afectando a las más de 300 personas que viven en el lugar.
Ernesto Carrasco, presidente de la Junta de Condominios Bloco 24, explicó que viven una grave situación con aguas servidas, “las cuales están totalmente colapsadas, tapadas. En los apartamentos de planta baja, ya el agua justamente no drena, todo se le desborda por las pocetas, por los inodoros y parte de su vida”.
Destacaron que ya han recurrido a todos los organismos estatales, pero siguen sin recibir soluciones. “Esto se debe a una ruptura, de acuerdo a los análisis que ha hecho HidroBolívar y que ha hecho la alcaldía en días anteriores, en el cual se determinó que el problema viene del tubo principal, por lo que hay que cambiar un tramo o rehacer un tramo de la tubería que ya colapsó y realmente ese trabajo no se ha iniciado”.
Explicaron que el problema lleva más de dos años. El colapso presuntamente se dio “porque anteriormente no salía justamente por planta baja y el agua iba drenando lo que pudiera. No sé si es que se iba consumiendo por debajo, todo el campo está inundado, húmedo, la parte de nuestra plaza también húmeda”.
“El agua sale por debajo de las tanquillas, ya se perforaron las tanquillas de captación que bajan por las torres A y las torres B de nuestro edificio, bloque 24, y sucesivamente. Entonces, eso origina que no sabemos qué excavación puede estar haciendo esa agua, que puede estar haciendo una cárcava por debajo, no sabemos el tiempo que ya tiene sumergida. Lo que sí es que ya brota por encima, sale a la cuneta”, detalló Carrasco.
Por esta situación también ha proliferado la aparición de plagas, mosquitos, ciempiés, roedores y cucarachas.
