Este domingo por la mañana, cientos de autobuses llegaron a Madrid desde todos los rincones de España transportando a militantes populares.
Su objetivo era protestar contra la posible amnistía a los líderes independentistas catalanes que el presidente Pedro Sánchez estaría dispuesto a aprobar.
Sin embargo, la convocatoria también buscaba respaldar unánimemente a Alberto Núñez Feijóo de cara a su investidura como presidente del gobierno del martes, aunque no consiguiera los apoyos necesarios a pesar de ganar las elecciones.
A las 12 horas, en la plaza Felipe II, Feijóo se fotografió rodeado de los principales dirigentes de su partido, entre ellos los expresidentes Aznar y Rajoy.
Con esta imagen pretendía exhibir músculo frente al PSOE debilitado por las negociaciones con los independentistas.
En un discurso, Feijóo expresó su rechazo a la amnistía y advirtió que su propuesta como alternativa de gobierno sería muy distinta. También contó con el respaldo de destacados socialistas críticos como Alfonso Guerra y Felipe González.
La convocatoria buscaba llenar la plaza para contrarrestar las críticas internas a Sánchez. Aunque el PP evitó dar cifras de asistentes, confiaba en congregar al menos a 600 personas con la presencia de toda su plana mayor territorial.
De esta forma, Feijóo centró su acto en oponerse a la investidura de Sánchez y trazó sus prioridades de cara a un futuro gobierno.
Con información de 20 MINUTOS