En Houston, Estados Unidos, crece la polémica por Colony Ridge, el condado de los bosques que no para de crecer.
Por Clarín
Cuando uno avanza por las nuevas calles que conducen al pueblo puede ver carteles en inglés y en español que anuncian con un pago inicial de 500 dólares.
Cada vez más inmigrantes -la mayoría hispanos e indocumentados- obtienen terrenos en el lugar. Los consiguen fácil por lo económicos que son y por los préstamos “no convencionales” y con pocas restricciones que les ofrecen.
Al día de hoy, según el New York Times, viven allí 40.000 personas, pero al ritmo que van las mudanzas podrían ser más de 100.000 en la próxima década.
El área, específica una fuente local al medio estadounidense, es única por su tamaño, los bajos costos del terreno, los bajos impuestos y por estar cerca de una ciudad importante.
Según The Daily Wire, el área en un momento tuvo la población hispana de más rápido crecimiento en el país y, por ende, las escuelas y la vigilancia policial empezaron a no dar a basto.
La polémica
El principal conflicto del área tiene que ver con la supuesta instalación de cárteles de droga en el lugar.
Los habitantes de barrios cercanos que responden al partido republicano protestan, además, porque los desarrolladores de Texas permitieron la creación de casas utilizando un método de financiación misterioso que permite a los inmigrantes indocumentados obtener préstamos hipotecarios sin los requisitos habituales necesarios.
La empresa desarrolladora ofrece financiamiento directo a compradores, incluidos aquellos con mal o ningún crédito y aquellos que solo tienen un número de impuesto federal como forma de identificación, especifica el Times.
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