La Autoridad de Antigüedades de Israel anunció este martes que sus arqueólogos están analizando viviendas y vehículos quemados durante la masacre de Hamás del 7 de octubre para intentar identificar los restos de fallecidos cuya identidad no ha sido determinada.
“Los arqueólogos de la Autoridad de Antigüedades de Israel se alistaron para unirse a los esfuerzos de búsqueda de personas desaparecidas en las casas y automóviles que fueron incinerados en la masacre del 7 de octubre”, informó hoy un portavoz de esta institución.
Los arqueólogos “estado empleando las técnicas y los conocimientos adquiridos en las excavaciones de sitios antiguos quemados y destruidos, y han descubierto muchos signos de restos humanos, con la esperanza de que proporcionen a las familias pruebas sobre qué sucedió a sus seres queridos”, agregó el comunicado, que detalló que los trabajos comenzaron hace dos semanas y que se centran en los kibutz de Beeri, Kfar Aza, Nir Oz y el sitio del Nova Festival, donde murieron 260 personas.
“Teniendo en cuenta todas las dificultades y los desafíos emocionales involucrados, nuestra esperanza es poder contribuir a la identificación certera del mayor número posible”, explicó Eli Escusido, director de la Autoridad de Antigüedades de Israel.
Durante las pesquisas realizadas hasta el momento, se ha logrado identificar restos de al menos diez personas fallecidas que figuraban como desaparecidas.
Además, se han enviado pruebas recogidas a la base militar que opera como centro forense para identificar a aquellos muertos que fueron reducidos a cenizas o mutilados hasta quedar irreconocibles.
El 7 de octubre, Israel declaró la guerra al grupo islamista palestino Hamás después de que este perpetrara un masivo ataque en territorio israelí que dejó más de 1.400 muertos (la mayoría civiles), 5.400 heridos y al menos 241 secuestrados en Gaza.
Los ataques israelíes de represalia sobre el enclave palestino han dejado más de 10.000 muertos (incluyendo más de 4.000 niños), más de 25.400 heridos y unos 1,5 millones de desplazados, además de al menos 30 soldados israelíes fallecidos durante la ofensiva terrestre. EFE