La ansiedad está cada vez más presente en nuestra sociedad y se manifiesta en distintos ámbitos de nuestra vida. La hiperconectividad debido al uso constante del celular es una muestra de ello, así lo reseñó INFOBAE.
En situaciones estresantes, la ansiedad es una respuesta fisiológica normal, leve y temporal. Pero cuando la respuesta ansiosa es desproporcionada con respecto al estímulo que la desencadena y, además, es una conducta que se mantiene en el tiempo puede derivar en un trastorno mental.
Por eso es importante entender cómo nuestros hábitos cotidianos pueden reflejar nuestro estado emocional. La ansiedad, que antes podía pasar desapercibida, ahora puede llegar a notarse en la conducta que tenemos respecto a nuestro dispositivo más personal: el teléfono celular.
Celular y ansiedad
Los hábitos y la conducta que uno tiene en el uso del smartphone podrían indicar la presencia de un trastorno mental como la ansiedad. Esto se debe a que, cuando las personas están ansiosas su cuerpo entra en modo de lucha o huida y, dado el grado de dependencia con nuestros dispositivos móviles, esa respuesta se refleja en cómo usamos nuestros teléfonos.
La respuesta de lucha y huida es un mecanismo automático de supervivencia en la que el cuerpo se prepara para realizar alguna de estas dos acciones y la ansiedad que sentimos al usar el celular genera esa respuesta. La relación entre los dispositivos móviles y las reacciones emocionales es tan estrecha por lo mucho que nos hemos acostumbrado a depender de ellos.
Nuestro smartphone es esencial para manejar la vida diaria, lo que puede generar tensiones adicionales sobre nuestro bienestar emocional.
Prestar atención a los signos de ansiedad al usar el celular nos ayuda a identificar alguna conducta que, con el asesoramiento psicológico respectivo, puede llevarnos a un diagnóstico acertado. El tratamiento para un trastorno mental como la ansiedad puede incluir terapia psicológica y medicamentos como los ansiolíticos.
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