En Estados Unidos se vive una fuerte oleada migratoria, con miles de personas que cruzan las fronteras todos los días por diferentes motivos. Si bien muchas de las que llegaron a ese país ilegalmente no tienen forma de obtener papeles ni de regularizarse en el trabajo, otros inmigrantes indocumentados pueden cambiar sus estatus, como los refugiados o asilados. En estos casos, también tienen opciones de trabajar en esa nación a través de un documento clave.
Por La Nación
Las leyes federales requieren que un trabajador inmigrante tenga un estatus de visa válido, una green card o un permiso de trabajo, conocido como EAD, para ser empleado en ese país. Por lo tanto, los indocumentados que fueron admitidos con visas como la de turista no son elegibles para obtener el EAD. Los empleadores también están protegidos, por lo que pueden verificar la elegibilidad de un posible empleado a través del formulario I-9, que determina si tienen autorización.
¿Cómo pedir un EAD?
Los solicitantes de asilo, por ejemplo, pueden aplicar a un permiso de trabajo 150 días después de comenzar su caso. Tramitarán su formulario I-765 y recibirán el EAD luego de 180 días. El sitio web del gobierno estadounidense indica que este papel es una forma de comprobar que una persona está autorizada para trabajar en EE.UU. por un período específico, también se le conoce como I-765, Solicitud de Autorización de Empleo.
Las personas que lo pueden pedir cumplen con diferentes características, entre las que se encuentran:
Estar autorizados a trabajar por su estatus de inmigrante o ciertas circunstancias, como los asilados o refugiados.
Se les requiere solicitar un permiso de trabajo porque:
La persona tiene en trámite un Formulario I-485, Solicitud de Registro de Residencia Permanente o Ajuste de Estatus.
El solicitante tiene en trámite un Formulario I-589, Solicitud de Asilo y de Suspensión de Remoción.
¿Qué pasa si se trabaja sin permiso en Estados Unidos?
Un migrante con estatus de asilado o refugiado deja de considerarse como “indocumentado”, por lo tanto, tiene protecciones. Sin embargo, si no se cuenta con ningún tipo de acreditación válida y se trabaja, tanto la persona como sus jefes se exponen a multas y penas graves.
De acuerdo con el despacho especializado en inmigración Curbelaw, algunas de las condenas para los empleadores de inmigrantes indocumentados son:
-De US$375 a US$2000 para la primera infracción.
-De US$3200 a US$6500 por una segunda ofensa por cada empleado ilegal contratado.
-US$4300 a US$16.000 por cada empleado ilegal contratado en el caso de los reincidentes.
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