La Ciudad de México enfrenta una crisis humanitaria debido al aumento de migrantes que optan por quedarse en su camino hacia Estados Unidos. El flujo migratorio en México hacia Estados Unidos experimentó un aumento significativo en 2023, con estimaciones que indican que más de 400.000 migrantes pasaron por el país en su ruta hacia Estados Unidos. De estos, alrededor de 6.000 se encuentran viviendo en situación de calle en la metrópoli.
Por El Tiempo
La situación se agrava con el desbordamiento de los albergues en la Ciudad de México. Centros como Casa Tochán y Cafemin están operando con más del doble de su capacidad, lo que refleja la magnitud del problema. La adopción de nuevas rutas migratorias, como el riesgoso cruce del Darién, añade presión adicional a los recursos disponibles y a las autoridades migratorias.
Los migrantes enfrentan persecución y diversos obstáculos a la movilidad, entre ellos la imposibilidad de adquirir boletos de avión o autobús si carecen de documentos. Esta situación ha llevado a algunos migrantes a recurrir a métodos peligrosos, como subirse a La Bestia, un tren conocido por sus riesgos y accidentes letales.
Falta de atención gubernamental y colapso de albergues en Ciudad de México
Organizaciones que apoyan a los migrantes denunciaron en una conferencia de prensa la falta de atención por parte del gobierno de la capital azteca. Albergues como Casa Tochán, Cafemin, el Programa Casa Refugiados y la Fundación Humano y Libre están al borde del colapso, sin capacidad suficiente para atender la creciente cantidad de personas migrantes que llegan a la ciudad.
“Los albergues de la Ciudad de México estamos en crisis. En Tochan nunca había pasado que durmieran afuera. En Tochan cuentan con 46 camas, y actualmente tienen a 120 personas. Cafemin también excede sus capacidades y están albergando actualmente 460 personas”, señalaron representantes de los albergues. Acusaron que el gobierno de la Ciudad de México no ha hecho nada para resolver esta situación.
Señalaron que la situación actual representa una crisis humanitaria que exige medidas inmediatas por parte del gobierno de la Ciudad de México. Las condiciones de los albergues y las dificultades que enfrentan los migrantes, incluyendo la persecución y obstáculos a la movilidad, destacan la necesidad urgente de una respuesta gubernamental efectiva.
Lea más en El Tiempo