La sede de la Universidad Nacional Abierta en Táchira (UNA), situada en el sector La Popita de San Cristóbal, fue objeto del robo de cableado eléctrico que dejó a la institución sin fluido eléctrico. El primer robo de cableado ocurrió a mediados del año 2017.
Anggy Polanco / Corresponsal Lapatilla.com
Por tal motivo, las noches se convierten en la propia “boca del lobo”, y los indigentes se meten en la institución para cometer fechorías. Además, la sede no cuenta con bombillos ni luminarias, debido al abandono gubernamental que padece la sede.
Testimonios indican que la sede universitaria quedó desmantelada desde la época de protestas, pero “hace poco se metieron y se terminaron de llevar los pocos cables de la electricidad interna que quedaban”, indicaron fuentes internas.
“Esa universidad está toda a oscuras, tú pasas a las 8:00 de la noche y eso parece la boca de loco”, relata la fuente.
Personas vecinas de la casa de estudios señalan que los vigilantes no tienen bombillos de emergencia o lámparas recargables. Hasta hace poco tampoco había internet.