Nicolás Maduro insistió este domingo en sus intenciones de aferrarse a una silla en el palacio de Miraflores, una finalidad que, según sus palabras, justificaría cualquier medio.
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“Soy Nicolás Maduro, primer presidente chavista de la patria, que ha resistido con el pueblo y que los ha derrotado a ustedes apellidos, oligarcas”, comentó Maduro en un acto para celebrar en Caracas los 25 años de la llegada del fallecido Hugo Chávez al poder.
“Los mueve el odio, la ambición desmedida, el espíritu de venganza”, dijo Maduro sobre sus rivales políticos y alertó a sus seguidores que deben prepararse “para hacernos respetar en las calles, con el pueblo, con unión cívico-militar. Nosotros trabajamos preparados para cualquier sorpresa, para cualquier invento”.
Según el vocero chavista, “ya es tiempo de que la ultraderecha vaya aprendiendo a respetar”.
Sobre sus aspiraciones electorales, Maduro sentenció: “Ante cualquier circunstancia o invento imperialista oligárquico, calma y cordura, nervios de acero. Máxima unión y movilización cívico-militar, que el equipo gana. Y vamos a ganar, por las buenas o por las malas, siempre ganar”.