El informe anual sobre las amenazas a la seguridad nacional de Estados Unidos, que cada año prepara la Casa Blanca para el Capitolio, denuncia la gravedad de la situación en Venezuela, la perpetuación en el poder del chavismo y la posibilidad de una crisis migratoria aun mayor que la que ya ha provocado Nicolás Maduro.
Por David Alandete / abc.es
Este informe, titulado ‘Evaluación anual sobre amenazas’, fue enviado al legislativo el 11 de marzo, y ya avanza el fraude de las elecciones de julio: «El cuestionado presidente venezolano, Nicolás Maduro, mantendrá un sólido control del poder y es poco probable que pierda las elecciones presidenciales de 2024 debido a su control de las instituciones estatales que influyen en el proceso electoral y su disposición a ejercer el poder».
El informe asegura que hasta ahora, el régimen ha prohibido a los principales candidatos de la oposición ocupar cargos públicos, ha restringido la cobertura mediática de los políticos de la oposición y ha colocado a aliados estrechos de Maduro en el Consejo Nacional Electoral «para asegurarse la victoria de Maduro.
El informe lo elabora anualmente la Dirección Nacional de Inteligencia, que bajo Joe Biden ocupa Avril Haines. Ofrece cada año una perspectiva detallada sobre los desafíos más inmediatos y graves para Estados Unidos en el próximo año, con datos obtenidos de las agencias de Inteligencia.
En su edición de 2024 alerta de que el chavismo está pudiendo evadir las sanciones de la comunidad internacional por la ayuda expresa y decisiva de tres regímenes dictatoriales: Irán, Rusia y China. La Inteligencia norteamericana ha concluido que los lazos entre Maduro y esos tres poderes se han estrechado en años recientes, sobre todo debido a las sanciones.
Lo más grave, desde el punto de vista de EE.UU., es que la pobreza y la represión están agrandado un éxodo que ya es de los mayores de la historia. Han salido del país, estima la inteligencia norteamericana, 7,7 millones de venezolanos.
Afirma la directora de Inteligencia en el informe: «Más de 7,7 millones de venezolanos han abandonado el país desde 2017, de los cuales 6,5 millones viven en América Latina y el Caribe. Es probable que la emigración venezolana hacia la región y EE.UU. se mantenga elevada durante el próximo año, ya que la falta de oportunidades económicas probablemente persista».
Un dato relevante desde el punto de vista de EE.UU. es que el 80% de los venezolanos tienen ingresos por debajo del umbral de pobreza y los bajos niveles de crecimiento económicos que registra el régimen son insuficientes para sacar a la mayoría de la pobreza o mitigar los factores que impulsan la migración.
Biden ha anunciado que reimpondrá sanciones a Venezuela el mes próximo si no se levanta el veto a Machado y se permiten elecciones libres. Tras las anteriores elecciones, en 2018, EE.UU. negó legitimidad a Maduro y reconoció como presidente en funciones a Juan Guaidó, que era presidente de la Asamblea Nacional, controlada excepcionalmente por los opositores.
El equipo del actual presidente estadounidense decidió dejar de reconocer a Guaidó y retomó el diálogo directo con Maduro. El que era asesor de Biden para América Latina, Juan González, hasta viajó a Caracas para verse cara a cara con el dictador. Este mes González ha cesado en sus funciones.