Todo un entramado de acciones, con beneficios directos e indirectos hacia grupos de organizaciones pintadas de perfil político o de acción social, sociedades económicas, grupos derivados de la propia estructura del poder central, son los que realmente han soportado y suministrado aliento a los creadores “intelectuales” de la condición actual de Venezuela.
Es importante conocer al menos en sus características generales, a los benefactores en la estadía de semejantes representantes de los poderes públicos, porque la duda existe y las miradas capciosas y culpas recaen en un sector de la población de la clase baja, que por cierto hoy día, nada guarda desde el punto de vista del apoyo en cualquier término a la estructura de poder.
Si bien los creadores de la desgracia actual no se beneficiaron inicialmente y directamente con las lisonjas de los que hoy son sus colaboradores, si fueron percatándose que chantajear en unos casos y convertir en socios en otros, era la manera de alargar su supervivencia.
Desde todos los niveles de la estratificación social, actividades económicas, derivaciones de los poderes públicos y partidos políticos, hay un puñado de personas naturales y jurídicas empujando hacia lo más injustificado y perverso para el país, en lo que se refiere a una sociedad libre.
Como preludio, la estructura actual de poder en Venezuela ciertamente que posee varios vértices, una aparente estructura estable: un poliedro regular. Realmente la estructura, es irregular, es inestable como consecuencia de presentar varias caras que no soportan su peso, una de ellas la más débil y en la que han colocado todas sus “esperanzas” para precisamente evitar su fin, es la cara de la Inhabilitación.
@abrahamsequeda