Con la creciente conciencia sobre la importancia de la salud dermatológica, muchos individuos se preguntan cómo identificar a tiempo si sus lunares son malignos. Los expertos en dermatología ofrecen consejos clave para la prevención y detección temprana de posibles signos de melanoma y otros tipos de cáncer de piel.
Por La Razón
Conoce tus lunares: Es fundamental estar al tanto de la apariencia y ubicación de tus lunares. Realiza autoexámenes regulares para detectar cualquier cambio en su forma, color o tamaño.
Utiliza la regla ABCDE: Este método es útil para evaluar la sospecha de un lunar maligno. Presta atención a los siguientes aspectos:
Asimetría: Si una mitad del lunar no coincide con la otra.
Bordes irregulares: Los bordes de un lunar maligno tienden a ser irregulares, borrosos o mal definidos.
Color variado: Los lunares que contienen diferentes tonos de color, como negro, marrón, rojo o blanco, podrían ser sospechosos.
Diámetro: Los lunares que son más grandes que el tamaño de un lápiz borrador (aproximadamente 6 mm) deben ser examinados por un dermatólogo.
Evolución: Cualquier cambio en el tamaño, forma, color o sensación de un lunar existente puede ser una señal de alerta y debe ser evaluado por un profesional de la salud.
Evita la exposición al sol sin protección: La exposición excesiva a los rayos UV aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de piel, incluido el melanoma. Utiliza protector solar con un FPS adecuado, ropa protectora y evita la exposición al sol durante las horas pico.
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