María Corina Machado no duda que arrasaría en una elección contra Nicolás Maduro. Pero, inhabilitada, apuesta ahora en una filósofa y profesora universitaria para dar la pelea en las presidenciales del 28 de julio en Venezuela.
Será otra Corina: Corina Yoris será inscrita como candidata de la unidad, pero Machado será el rostro de la campaña. En redes sociales ya se habla de “Corina al cuadrado”.
“Vamos a dar esta lucha juntos”, dijo Machado, de 56 años, al presentar a Yoris, una octogenaria hasta ahora desconocida en la política venezolana. “Yo voy a seguir recorriendo toda Venezuela, llevando fuerza y esperanza a cada rincón del país”.
Machado, a quien algunas encuestas dan hasta 70% de intención de voto, mantuvo activa siempre su campaña, incluso después de que la corte suprema ratificó la prohibición para ejercer cargos públicos por 15 años.
A su paso, decenas de personas salen de sus casas a saludarla, unos ondeando banderas. “La dama de hierro”, la han bautizado seguidores, algunos por su tono fuerte, tajante contra el gobierno; otros en referencia a la fallecida ex primera ministra británica Margaret Thatcher, como ella, anticomunista y de postura económica liberal.
Machado arrasó en octubre pasado en las primarias para elegir al candidato de la coalición opositora Plataforma Unitaria, con un 92% de los votos.
Definió su victoria como un “mandato” de la gente para derrotar a Maduro, que aspira a un tercer período de seis años. El mandatario llegó al poder en 2013, tras la muerte de Hugo Chávez (1999-2013), y fue reelecto en 2018 en unos cuestionados comicios, bajo sospechas de fraude.
“La abuela que necesita Venezuela”
“Hasta el final” ha sido el mantra de Machado, que mantuvo siempre la esperanza de poder revertir su inhabilitación, pese a que las autoridades nunca asomaron la posibilidad de hacerlo. “Esa es la realidad hoy, y sabemos que están pasando las horas”, admitió el viernes, tres días antes del cierre del período de postulaciones.
Y la apuesta está en Yoris, de 80 años, que nunca antes ejerció un cargo público y mucho menos encaró una campaña de este calibre.
Nacida en Caracas, esta licenciada en Filosofía, Letras y doctora en Historia ha ejercido la docencia por décadas en la prestigiosa Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), según un perfil compartido por la campaña de Machado.
Presidió sociedades de filosofía, y fue miembro de la Comisión Nacional que organizó las primarias que ganó Machado.
“Ahí fue cuando yo la conocí (…) y desde el primer día me impactó su inteligencia”, dijo mientras la abrazaba y definía como “la abuela que necesita Venezuela”.
“Vamos hacia un camino de transición y tenemos que recorrerlo juntos”, señaló Yoris. “Todos somos necesarios, nadie está sobrando aquí”.
“Dama de hierro vs. Súper Bigote”
La vida política de Machado comenzó en 2002 cuando creó la organización Súmate, que impulsó un referendo para revocar al fallecido presidente Hugo Chávez (1999-2013), y siguió hasta el Parlamento, donde encaró a aquel mandatario cuando era intocable, casi un Dios.
“Expropiar es robar”, le dijo a Chávez durante una rendición de cuentas en el Parlamento en 2012. “Le sugiero que gane las primarias porque está fuera de ránking para debatir conmigo”, le dijo el mandatario. “Águila no caza moscas”.
Una década después, Machado lo hizo: conquistó el voto opositor con una “opción diferente” a la oposición tradicional, con la promesa de acabar con el socialismo para dar paso a un país liberal.
Pero se le atravesó la inhabilitación, sumada a una prohibición de salida del país que la mantiene lejos de sus hijos, residentes en el exterior.
“La dama de hierro versus Súper Bigote. A ese es que vamos a derrotar”, dijo hace un par de semanas a la AFP Karín Rodríguez, un albañil de 58 años en el estado Carabobo (centro-norte). Hace referencia a un apodo de Machado y al dibujo animado de propaganda que muestra al mandatario como un superhéroe en la TV estatal.
“Y si ella no puede ir a las elecciones, votaremos por quien ella diga”. AFP