La Fiscalía colombiana asumió la investigación por la muerte de cinco niños indígenas ocurrida en una zona rural del departamento del Cesar (norte) por supuestamente consumir frutos venenosos, informó este martes la entidad.
La investigación de la muerte de los cinco hermanos, dijo la Fiscalía en un comunicado, la asumió “en atención a la solicitud hecha por seis gobernadores del pueblo indígena Yukpa”.
La muerte de los niños de 15, 13, 11, siete y tres años ocurrió el domingo pasado en el asentamiento kchusweye, en el caserío El Limón.
Un equipo de la Fiscalía avanza en las investigaciones que buscan establecer las causas del trágico hecho y se contará con la asesoría de personas delegadas para asuntos indígenas de la entidad y el apoyo de autoridades de las comunidades.
La Fiscalía explicó que preliminarmente se ha conocido que el padre de los niños regresó a su lugar de residencia luego de asistir a un culto religioso y encontró a tres de los menores de edad muertos y a otros dos inconscientes.
Los dos menores en estado de somnolencia fueron trasladados a un centro asistencial de la localidad de Codazzi, en el que posteriormente fallecieron.
Las diligencias de levantamiento de los cuerpos en la vivienda las hicieron representantes de la etnia Yukpa, de acuerdo con sus protocolos, usos, costumbres y tradiciones.
Ante la gravedad de lo sucedido, los padres de los niños solicitaron la cooperación y apoyo del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, y autorizaron la práctica de las necropsias y otros estudios médicos complementarios.
En un comunicado, los gobernadores indígenas pidieron a la Fiscalía, la Defensoría del Pueblo, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) y otras entidades “asumir los asuntos que por competencia les corresponde para esclarecer la muerte de los cinco menores de edad y brindar la asistencia necesaria en este caso”.
La Gobernación del Cesar dijo el lunes que “se evalúa como hipótesis la posibilidad de que los cinco menores de edad consumieran un fruto que habría generado intoxicación”.
Por su lado, el alcalde de Agustín Codazzi, Hernán Baquero, dijo a periodistas que no se descarta que las víctimas hayan consumido accidentalmente veneno para ratas.
Los fallecidos estaban solos al momento de la tragedia. EFE