Una vez más, vecinos de diferentes comunidades de la zona norte de la ciudad de Mérida han manifestado su malestar al sumar más de 48 horas sin suministro de agua potable por tubería.
Por Jesús Quintero / Corresponsalía lapatilla.com
Sectores como Santa Ana y Los Chorros padecen no solo la crisis de agua, sino también los prolongados cortes de electricidad que oscilan entre 6 y 12 horas en varios bloques.
Mientras tanto, los cortes de energía eléctrica imprevistos representan una situación de emergencia para muchos ciudadanos, generando un impacto psicológico en la mayoría de los merideños, lo que afecta el bienestar integral de la gente que ya viene golpeado desde hace años atrás.
Quienes residen en urbanizaciones con tanques subterráneos de almacenamiento de agua, para que el líquido llegue a pisos superiores, requieren de la fuerza de un motor de bomba que impulse la presión de agua hacia arriba, acción que cuando es suspendido el servicio eléctrico, es prácticamente imposible.
Los ciudadanos exigen la atención inmediata de las autoridades ante esta situación que atenta directamente contra la calidad de vida de los merideños, sin importar distinción social, política y económica.