Las industrias neerlandesas de semiconductores, aeroespacial y marítima han sido objetivo de espionaje para China a lo largo del último año, cuando el país asiático intensificó sus operaciones cibernéticas en busca de conocimientos, denunció este jueves el servicio de inteligencia y seguridad militar de Países Bajos (MIVD).
En su informe anual, el MIVD aseguró que Países Bajos tiene “conocimiento sobre recursos militares modernos y despliegues militares” que China puede “utilizar para seguir construyendo sus propias fuerzas armadas”, lo que explica los motivos por los que -confirmó el MIVD- Pekín trató de espiar los proyectos de equipos militares, unidades operativas y personal de Defensa.
“China intensificó sus operaciones cibernéticas el año pasado. Las industrias neerlandesas de semiconductores, aeroespacial y marítima, y nuestras instituciones de conocimiento se están convirtiendo cada vez más en objetivos de espionaje para China. Esto se debe a la posición única y de alta calidad del conocimiento que tiene Países Bajos en estos sectores”, señaló el MIVD.
En 2023, los ciberatacantes pudieron penetrar una red de Defensa, pero debido a que la red no estaba vinculada a la conexión amplía del Ministerio, “el daño fue limitado”. Estos hackers chinos no solo tenían como objetivo las actividades de Defensa neerlandesa y se cobraron más de 20.000 víctimas en todo el mundo, según el MIVD.
Rusia
Los servicios de inteligencia neerlandeses mantienen también a Rusia en el radar y aseguran que han observado un aumento del ciberespionaje desde la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022 porque Moscú intenta obtener información, entre otros, sobre los transportes de recursos militares occidentales dentro y fuera de Ucrania. Países Bajos forma parte de la ruta de suministro.
“La amenaza de Rusia es grande. Países Bajos es un objetivo atractivo, en parte porque es un importante nodo militar. También hay muchos nodos de datos en el Mar del Norte que Rusia está interesada en sabotear físicamente. Para prevenir este sabotaje, trabajamos junto con servicios gubernamentales, instituciones de conocimiento y el sector privado”, añadió el director del MIVD, Peter Reesink.
Además de “interrumpir operaciones cibernéticas rusas” a lo largo de 2023, Países Bajos compartió información de inteligencia con Ucrania sobre operaciones cibernéticas rusas, lo que permitió a Kiev “tomar medidas y cerrar fugas”, contribuyendo así a la protección de las redes gubernamentales ucranianas y la infraestructura vital.
Como las operaciones cibernéticas rusas tienen como objetivo acceder a la infraestructura vital para sabotearla, advierte Reesink, “debemos hacer todo lo posible para evitar que Rusia tenga éxito” en esto.
“No quiero pensar que Rusia logre, por ejemplo, cerrar la red energética neerlandesa. Eso podría perturbar nuestra sociedad y lo consideramos un desarrollo preocupante”, alertó.
Los servicios secretos rusos también tienen por objetivo organizaciones internacionales que tiene su sede en Países Bajos, como la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), y la Corte Penal Internacional (CPI), que tiene abierta una investigación por crímenes de guerra en Ucrania y ha emitido una orden internacional de arresto contra el presidente ruso Vladimir Putin. EFE