El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, mantuvo “contacto permanente” con el rey Felipe VI luego de anunciar que cancela su agenda para evaluar una posible renuncia.
La decisión de Sánchez se dio tras conocerse que un juzgado abrió una investigación contra su esposa, Begoña Gómez, por presuntos delitos de tráfico de influencias.
El último acto público entre el monarca y el mandatario fue la entrega del Premio Cervantes. Este jueves, el Rey asistió a eventos en Santander pese a la situación.
Tras su reflexión, Sánchez comunicará el lunes si continúa al frente del Ejecutivo en una rueda de prensa. El sindicato Manos Limpias, de ultraderecha, presentó la denuncia contra la First Lady.
El líder socialista reaccionó de esta forma ante la apertura del caso judicial contra su pareja, en medio de contactos con la Jefatura del Estado.
Con información de EFE