Líderes y representantes de decenas de países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte se reúnen en Washington esta semana para discutir políticas de seguridad y defensa en medio de amenazas mundiales.
La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) celebra esta semana su cumbre anual, que reunirá en Washington a líderes y representantes de los 32 países miembros de la alianza, para abordar temas como la respuesta a amenazas emergentes, la modernización de las fuerzas armadas y el fortalecimiento del bloque.
Por VOA
La versión 75 del evento se inaugurará el martes 9 de julio y continuará hasta el jueves 11. Los eventos principales se realizarán en el Centro de Convenciones de la capital estadounidense.
Los residentes de Washington verán disrupciones en su rutina durante la semana de la cita. Una decena de calles alrededor de la sede de la cumbre estarán cerradas y bajo estricta vigilancia. Aquellos que vayan a negocios, restaurantes y residencias en el área tendrán que pasar por puntos de seguridad para ir a sus destinos regulares.
Dos estaciones del metro ubicadas inmediatamente debajo de la sede de la reunión estarán cerradas y varias rutas de buses serán ajustadas en función de las necesidades de seguridad de los asistentes al evento.
“Estamos listos para asegurarnos de que la próxima semana sea una experiencia segura y fluida para las docenas de líderes mundiales que estarán aquí”, dijo la alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, quien llamó a los locales a tener “paciencia”.
¿Qué se discutirá en la cumbre?
Las tensiones con Rusia, las relaciones con China y los desafíos globales como el terrorismo y la ciberseguridad, serán prioridad en las discusiones de la cumbre.
Previo al inicio del evento, los aliados de la OTAN acordaron financiar la ayuda militar para Ucrania por un valor de 43.000 millones de dólares el próximo año. Este convenio financiero es parte de un paquete más amplio para Ucrania que los líderes de la OTAN acordarán cuando se reúnan en la cumbre.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, había pedido a los aliados que asumieran un compromiso de varios años para mantener la ayuda militar a Kiev al mismo nivel que desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania en 2022.
“En la Cumbre de Washington demostraremos una vez más la unidad y la fuerza de la OTAN, en apoyo a Ucrania y para mantener seguros a todos nuestros pueblos y nuestros valores”, dijo Stoltenberg.
Los aliados todavía están en desacuerdo sobre si se debe fortalecer, y cómo, el texto de la OTAN sobre la futura membresía de Ucrania en la alianza.
La línea oficial de la OTAN es que Ucrania se unirá algún día, pero no mientras el país esté en guerra. “El futuro de Ucrania está en la OTAN”, declararon sus líderes en la cumbre de Vilnius del año pasado.
Algunos aliados quieren que se fortalezca este lenguaje, sugiriendo que la cumbre declare que el camino de Ucrania hacia la membresía es “irreversible”, según diplomáticos.
Otros miembros tendrán sus propias prioridades en la conversación. Polonia espera traer guardias fronterizos y policías de Finlandia, Alemania y Grecia para ayudar a patrullar su frontera con Bielorrusia, en medio de crecientes preocupaciones sobre las presiones migratorias desde el Este hacia Europa.
Alemania y Polonia presentaron un plan de acción conjunto en el que acordaron discutir el impulso de la cooperación en materia de defensa, incluida una presencia más fuerte de la OTAN en la frontera oriental de la alianza y la coordinación de la ayuda a Ucrania.
Se espera que el presidente de EEUU, Joe Biden, ofrezca una conferencia de prensa durante la cumbre para detallar las prioridades del país.
¿Por qué es importante la OTAN?
La Alianza entre los países del Atlántico Norte se creó en 1949 y tiene como objetivo “garantizar la libertad y la seguridad de sus miembros por medios políticos y militares”.
Uno de los aspectos más importantes de la OTAN es el principio de defensa colectiva, en el que se establece que un ataque contra uno o más miembros se considera un ataque a todos, y así, los demás miembros pueden responder colectivamente a ellos.
Los países miembros de la OTAN se comprometen con un objetivo de gasto del 2 % de su Producto Interno Bruto en Defensa y aportaciones a misiones específicas de la Alianza.
En junio, los aliados decidieron que la OTAN asumiría un papel más importante en la coordinación del suministro de armas a Ucrania, reemplazando a EEUU en un intento por salvaguardar el proceso mientras el escéptico de la OTAN, Donald Trump, busca un segundo mandato en la Casa Blanca.
Aunque América Latina no es parte de la OTAN, la cumbre puede tener implicaciones indirectas para la región, al influenciar en las políticas de seguridad y defensa de los principales socios latinoamericanos, entre ellos, Estados Unidos, Canadá y España.
Sofia Pisani de la Voz de América informa desde Washington.
