Las hermanas Pericana viven en Barcelona. Venden chupis (helados) para complementar sus ingresos. Son profesionales, pero no pueden ejercer porque los empleos formales “no generan ingresos suficientes para vivir”.
Corresponsalía lapatilla.com
“Vinimos a ver a Edmundo y María Corina, queremos escuchar su mensaje, tenemos fe en que las cosas van a mejorar, después del 28 de julio”, dijo Katy Pericana.
Son un grupo de mujeres, que armadas con cavas salen todos los días a vender sus helados. Este miércoles aprovecharon la concentración de la Unidad en el norte de Anzoátegui para escuchar el mensaje de Edmundo González y María Corina Machado.
“Nos fue bien hoy, vendimos como 350 chupis en un ratico. No trajimos más porque nos vinimos a pie para la concentración“, señaló Pericana.
Ellas, como muchos jóvenes venezolanos egresados de universidades en el país, esperan una solución a los problemas económicos de Venezuela a través de un cambio de modelo.