Al menos 12 personas murieron y centenares de miles se encuentran afectadas a causa del fuerte temporal causado por un frente monzónico y el tifón Gaemi, lo que provocó que las autoridades de Manila declararan este miércoles el estado de calamidad por las inundaciones.
A las 8 víctimas mortales en los días pasados se sumaron hoy cuatro fallecidos, incluidos una mujer embarazada y tres menores de 9, 13 y 15 años, debido a un corrimiento de tierra en la localidad de Sitio Manalao, en la provincia de Batangas, informaron las autoridades locales en Facebook.
El Gobierno local de Agoncillo, donde se encuentra Sitio Manalo -unos 80 kilómetros al sur de Manila-, indicó que está prestando ayuda a las familias y que continúan con las evacuaciones.
La Guardia Costera filipina envió hoy refuerzos para ayudar en las tareas de evacuación por las graves inundaciones en Manila y señaló en un comunicado que sus efectivos están trabajando “sin descanso bajo condiciones difíciles” para evacuar a los residentes en zonas inundadas o que supongan un riesgo para la seguridad.
Según las fotos de EFE-EPA, los vecinos tratan de poner a salvo a sus familiares y enseres en barcas o a pie, con el agua hasta la cintura en algunas zonas del área metropolitana, donde decenas de miles de personas sufren cortes de electricidad.
Debido a las graves inundaciones, las autoridades de área metropolitana de Manila y otras zonas del norte del archipiélago ordenaron el cierre de colegios y oficinas hoy y mañana, mientras que también hubo cancelaciones de vuelos y no operó la bolsa de valores en la capital.
Ante la gravedad de las inundaciones, las autoridades de la metrópoli de Manila declararon hoy el estado de calamidad ante los efectos de las lluvias monzónicas exacerbadas por el tifón Gaemi, según informó la agencia estatal de noticias PNA.
Por su parte, el Departamento de Energía informó de que más de 124.000 hogares se han quedado sin electricidad, incluidos más de 45.000 en Manila.
Las lluvias están afectando principalmente al norte de Filipinas, aunque en los días anteriores al menos 8 personas murieron y más de 800.000 fueron afectadas, principalmente en el sur, por el temporal y Gaemi, que ha pasado de manera paralela al archipiélago filipino sin llegar a tocar tierra.
Gaemi pasó de tormenta tropical a tifón el lunes con vientos de 150 kilómetros por hora y ráfagas de hasta 185 kilómetros por hora, según la agencia filipina PAGASA, provocando inundaciones y corrimientos de tierra que han afectado a decenas de carreteras y puentes en diversas regiones del país.
A medida que iba avanzando y ganando fuerza, Gaemi se desplazó hacia el noroeste, sin llegar a tocar tierra del todo en Filipinas, y se acerca como supertifón hacia Taiwán, donde el temporal ya ha dejado un muerto y decenas de heridos.
Cerca de una veintena de tifones golpean cada año Filipinas, principalmente entre junio y diciembre, lo que convierte al país en uno de los más vulnerables del mundo a los efectos del cambio climático. EFE