Un artículo publicado por el periodista Daniel Lozano en el diario español EL MUNDO explicó que “la desaparición de José Luis Rodríguez Zapatero del primer plano de la política caraqueña provocó la semana pasada sorpresa y hasta estupor”.
El ex jefe del Gobierno español ni siquiera se sumó al comunicado conjunto de los dos ex presidentes del Grupo de Puebla, Ernesto Samper y Leonel Fernández, con quienes compartió observación en Caracas.
Tampoco la televisión bolivariana hizo público ninguno de sus habituales y amistosos encuentros en el Palacio de Miraflores con Nicolás Maduro.
Según las fuentes de Daniel Lozano, Zapatero lleva a cabo “una maniobra para que el lobby de izquierdas del que forma parte no admita que hubo fraude en Venezuela”.
Asimismo, el expresidente del gobierno español considera que reclamar la publicación de resultados es “hacerle juego a una oposición violenta”.
La comunidad internacional, inclusive los liderazgos de izquierda de México, Brasil y Colombia, han exigido al Consejo Nacional Electoral (CNE) que muestre las actas de escrutinio con las que se fundamentó para proclamar como “presidente electo” a Maduro.
Lejos de prestarse para la verificación independiente, el chavismo impugnó el resultado para llevar el proceso al Tribunal Supremo (TSJ), pese a que no cuenta con las atribuciones para dirimir la validez del material electoral.
Por su parte, María Corina Machado y Edmundo González publicaron en una página web todas las actas cosechadas por sus testigos de mesa, así como de otros colaboradores. Sus datos certifican la victoria aplastante del candidato unitario, un resultado contrario al que anunció el Poder Electoral.
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