Gimnasio vaginal: todo lo que debe saber de esta técnica para fortalecer esta importante área del cuerpo femenino

Gimnasio vaginal: todo lo que debe saber de esta técnica para fortalecer esta importante área del cuerpo femenino

abstract image of female genital organs from hands and pills. concept of women’s health and the treatment of female diseases of the urinary tract | Foto: Getty Images/iStockphoto

 

 

 





Así como existe la figura del entrenador personal para que, ante el espejo, la persona pueda verse y sentirse en forma, también existe un personal trainer para ese importante conducto muscular femenino: la vagina.

Por Semana

Se trata de un equipo de alta tecnología que fue diseñado para fortalecer el piso pélvico de las mujeres, lo que tiene varios beneficios para su salud, entre ellos la obtención de mayor placer en las relaciones sexuales, así como la prevención del descolgamiento o la caída de los órganos cercanos, lo cual puede producir incontinencia urinaria en muchos casos.

De acuerdo con el uroginecólogo colombiano Jorge Alberto García —pionero en traer este tipo de aparatología al país—, se trata de “un equipo que tiene una fuerza regulada y que es manejada por un software que produce contracciones en la pelvis, lo que hace que los músculos de la vagina se fortalezcan. Con ello, se mejora la sensibilidad a la hora del sexo y se previene la incontinencia urinaria o los prolapsos, que es la salida de un órgano por donde no debería salir”, indica el especialista.

Y agrega, a manera de ejemplo sencillo, que “es como si una hamaca no tuviera cuerdas suficientemente fuertes; si se le pone peso, lo que está adentro descenderá, para nuestro caso estamos hablando de la vejiga, el útero y el recto”, dice.

Y aunque la incontinencia urinaria suele ser dos veces más frecuente en las mujeres que en los hombres, el equipo también puede ser usado por ellos toda vez que también cuentan con piso pélvico, solo que con una diferencia: “el piso pélvico femenino trae un orificio adicional, que es la vagina, y eso hace que su resistencia sea menor que el del género masculino”, dice el especialista.

Y, si a esto se le añade que la mujer experimenta la gestación de un feto, “aparece un estrés agregado para sus órganos genitales pues hay que lograr que la cabeza del bebé —que en promedio suele medir unos 10 centímetros— atraviese el canal vaginal. Para llegar a este punto los tejidos deben prepararse y la mejor forma es haciendo que sean más fuertes y elásticos”, sostiene el doctor García.

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