El Ejército israelí aseguró este jueves que ha encontrado explosivos en bolsas con el logotipo de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, la UNRWA, en el barrio de Tal al Sultan, en la localidad de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza.
En un comunicado, las fuerzas israelíes incluyeron imágenes de las bolsas, supuestamente ubicadas cerca de una escuela. En la zona aseguraron también haber encontrado armas, documentos de inteligencia y chalecos antibalas.
Israel ha señalado a la agencia por mantener vínculos con Hamás y en enero acusó a 12 empleados de participar en los ataques del 7 de octubre, aunque no aportó pruebas.
La semana pasada, el Departamento de Asuntos Internos de la ONU (OIOS) divulgó que nueve de los empleados de la UNRWA señalados por Israel “pudieron” estar involucrados en el ataque del 7 de octubre, por lo que han sido despedidos, pero el organismo especificó que no pudo verificar “independientemente” las pruebas en custodia israelí.
Israel comenzó una ofensiva terrestre contra Rafah a comienzos de mayo, que obligó a más de un millón de desplazados a huir hacia la designada como “zona humanitaria”, que recorre la costa gazatí y llega hasta la localidad de Deir al Balah, en el centro de la Franja.
Sucesivos ataques israelíes y órdenes de evacuación han ido reduciendo esta “zona segura”, plagada de tiendas de campaña y sin apenas acceso al agua corriente o la electricidad.
El Ejército israelí aseguró hoy que durante las últimas horas ha eliminado a unos 50 presuntos combatientes palestinos en el barrio de Tal al Sultan.
Las operaciones en Rafah comenzaron con el objetivo de eliminar la brigada de Hamás en la localidad.
Ayer, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, anunció que los cuatro batallones que componían la brigada han sido eliminados, pero sin mencionar el fin a las hostilidades en la zona, donde mantienen cerrado el cruce de Rafah sin entrada de ayuda humanitaria.
La permanencia de las tropas israelíes en la frontera de Gaza con Egipto es uno de los principales asuntos que están impidiendo la firma de un acuerdo de alto el fuego con Hamás, ya que las autoridades israelíes se niegan a abandonarlo.
Hamás, por su parte, rechaza cualquier acuerdo que no implique la salida total de los soldados israelíes de la Franja y el fin de la guerra.
Los ataques israelíes ya han dejado más de 40.265 muertos, más de 93.144 heridos, unos 10.000 desaparecidos bajo los escombros y 1,9 millones de desplazados que sobreviven a una crisis humanitaria sin precedentes.
EFE