Aunque la defensa anunció que recurrirá y que no se trata de una sentencia firme, Daniel Sancho fue condenado la semana pasada a cadena perpetua por el asesinato premeditado de Edwin Arrieta, así como por la ocultación de su documentación y su cadáver. El veredicto ha estado en boca de todos en España y ha alimentado durante horas las tertulias de las televisiones o de los canales de streaming.
Por larazon.es
Una de las voces que más alto se ha pronunciado sobre el caso ha sido la de Frank Cuesta, residente en Tailandia desde hace años y familiarizado con la ley del país por los problemas por los que pasó hace tiempo su exmujer, detenida por tráfico de drogas.
Cuesta, que en los últimos meses ha intentado ayudar con sus consejos a la familia de Sancho, ha señalado que Daniel ahora atraviesa un momento de lo más complicado y que sus seres queridos han de estar muy pendientes de él. Alerta del riesgo de suicidio por las duras condiciones que sufrirá en la cárcel de Tailandia, y recalca la importancia de que se encuentre todo lo fuerte de mente que le sea posible.
“Lo que tienen que pensar los padres es que si quieren que su hijo vuelva a casa en 8 o 10 años, su hijo tiene que estar bien de la cabeza. Su hijo, ahora mismo, no está bien de la cabeza y no es porque haya asesinado a alguien, sino porque lo primero que hace un preso con una cultura extranjera en Tailandia cuando le condenan a una pena larga, es pensar en quitarse la vida, en escaparse o en cómo poder pagar para poder salir”, ha comentado el televisivo en el canal de Youtube de The Grefg.
Además, Cuesta considera que la defensa no debería estar “perdiendo el tiempo en recursos” y hacer todo lo posible para agilizar el regreso de Sancho a España para que cumpla su condena en una prisión de aquí.
Daniel Sancho, en cuarentena
Siguiendo con las normas y el protocolo del coronavirus establecido tras la pandemia en las cárceles tailandesas, Daniel Sancho se encuentra en cuarentena hasta el próximo 5 de septiembre yno será hasta el siguiente día cuando pueda recibir visitas o videollamadas, según ha explicado la agencia EFE.
El cocinero se encuentra en una celda con otros presos que están también en cuarentena. Si estos días uno diera positivo en coronavirus, todos volverían a estar aislados de nuevo hasta que den negativo.