La Policía española libera a 24 colombianas explotadas sexualmente por una red criminal

La Policía española libera a 24 colombianas explotadas sexualmente por una red criminal

MADRID, 23/09/2024.- La Policía española ha liberado a 24 colombianas obligadas a ejercer la prostitución todo el día en pisos de varias ciudades de España, víctimas de una red que captaba a mujeres con muy pocos recursos y las explotaba sexualmente. EFE/ Policía Nacional 

 

La Policía española ha liberado a 24 colombianas obligadas a ejercer la prostitución todo el día en pisos de varias ciudades de España, víctimas de una red que captaba a mujeres con muy pocos recursos y las explotaba sexualmente.

En un comunicado, la Policía informó de la detención de 21 personas que integraban una red criminal y la clausura de cinco pisos, en una operación que se inició con la denuncia de una de las víctimas, que permitió desmantelar este entramado liderado por una mujer y varios familiares. Los cuatro responsables han ingresado en prisión provisional.





Los investigadores pudieron establecer que la organización criminal captaba a las víctimas en su país de origen a través de anuncios en portales de internet de contactos sexuales y, ocasionalmente, a través de otras mujeres que habrían estado bajo control de la organización criminal.

Las mujeres aceptaban las condiciones impuestas debido a su precaria situación económica en origen y con la esperanza de mejorar su situación vital, siendo en muchas ocasiones el único sustento de su núcleo familiar.

Las víctimas viajaban por vía aérea desde su país de origen u otros países de la Unión Europea hacia España, simulando tratarse de un viaje de turismo, aunque la organización les repercutía esos gastos como deuda.

Cuando llegaban a España eran trasladadas a algunos de los pisos donde permanecían por periodos de 21 días, tras lo que eran trasladadas a otras viviendas con el objetivo de satisfacer la demanda constante de “mujeres nuevas” de los clientes y aumentar así los beneficios del entramado.

Las víctimas eran obligadas a aceptar todos los encargos sexuales durante las 24 horas del día con una única jornada de descanso a la semana y dos horas libres previo aviso. De las ganancias obtenidas por los servicios sexuales realizados, solo tenían derecho al 50 por ciento.

Los pisos de citas funcionaban también como puntos de venta y distribución de sustancias estupefacientes, principalmente cocaína, y de medicamentos sujetos a venta bajo prescripción médica indicados para el tratamiento de la disfunción eréctil. EFE