Las pandillas en Puerto Príncipe, la capital de Haití, están tratando de apoderarse de toda la ciudad, mientras la policía lucha para evitar que conquisten las pocas comunidades que aún no están en su poder.
lapatilla.com
La policía en Haití se enfrentó este lunes a un grupo armado que intentó apoderarse de una de las pocas comunidades de la capital, Puerto Príncipe, que no está controlada por pandillas.
El subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, Brian Nichols, emitió un comunicado a través de sus redes en donde condena enérgicamente la violencia pandillera que se está produciendo en Puerto Príncipe y que tiene como objetivo desestabilizar al gobierno.
“La misión del MSS y la policía haitiana están llevando a cabo operaciones conjuntas y han logrado proteger a los residentes de varias zonas, repeler a las pandillas, incautas armas y eliminar a varios pandilleros.
Apoyamos al pueblo haitiano, a la Policía Nacional Haitiana y a la misión del Servicio de Seguridad Nacional, incluidos los valientes esfuerzos de las fuerzas de Kenia, Jamaica, Belice y Las Bahamas, en sus esfuerzos por restablecer la seguridad. Las personas que intentan desestabilizar a Haití para obtener beneficios personales deberían preocuparse más por Haití y su pueblo. Los responsables deberán rendir cuentas ante las autoridades haitianas e internacionales.
Cómo se planteó al TPC y al Primer Ministro, ahora es el momento de la unidad nacional haitiana en la lucha internacional contra las pandillas. Ahora no es el momento de luchas políticas internas. Apoyamos firmemente los esfuerzos del Primer Ministro Conille y su gabinete para impulsar las prioridades nacionales establecidas por el TPC”, se lee en el comunicado.
