Arqueólogos egipcios descubrieron la tumba de 4000 años de antigüedad que perteneció a una sacerdotisa, hija del gobernador local Djefaihapi, que vivió durante el Imperio Medio, entre los años 2030 y 1640 a. C. Según explicaron los expertos, fue enterrada en dos ataúdes, algo que llamó su atención.
Por: La Nación
Gracias a las expediciones que emprenden diferentes universidades y centros de estudios arqueológicos de todo el mundo en Egipto, a lo largo de este año se hallaron nuevos restos de aquella civilización que marcó al norte de África hace más de 3000 años.
En esta oportunidad, el Ministerio de Turismo y Antigüedades de Egipto publicó un comunicado de prensa en su cuenta de Facebook, en el que brindó detalles acerca del descubrimiento. Esta expedición se llevó a cabo junto con arqueólogos alemanes, donde se halló la cámara funeraria de una mujer llamada Edy, la única hija del gobernador de la Región de Assiut durante el reinado del rey Snosert I, conocido como Jfay-Habi.
La tumba se encontró a unos 15 metros de profundidad en el lado norte del cementerio, en la que dos ataúdes -uno dentro del otro- contenían los restos de Edy. Su interior estaba totalmente grabado con imágenes del viaje que tuvo su cuerpo hasta ese sitio.
Puedes leer la nota completa en La Nación