Cruces ilegales en la frontera entre Estados Unidos y México están en camino de alcanzar su nivel más bajo durante la administración del presidente Joe Biden, según cifras internas de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) obtenidas por CBS News. Durante noviembre, se prevé que la Patrulla Fronteriza registre menos de 50,000 aprehensiones de migrantes que intentaron cruzar de manera irregular. Esto representa un promedio diario de 1,550 aprehensiones entre puntos legales de entrada, cifra que refleja una tendencia a la baja en comparación con meses anteriores.
Si esta proyección se cumple, noviembre marcaría un nuevo récord en la reducción de cruces ilegales, superando el mínimo actual de 54,000 detenciones en septiembre. Los datos muestran que la última vez que los cruces ilegales estuvieron en niveles tan bajos fue durante el verano de 2020, cuando la pandemia de COVID-19 limitó considerablemente la migración en toda la región.
La disminución de los cruces ilegales en la frontera sur no es un fenómeno reciente, sino parte de una tendencia que comenzó a principios de 2023. Según expertos, varios factores explican este descenso, siendo uno de los más relevantes las políticas migratorias implementadas por la administración Biden.
En junio, Biden promulgó una política de asilo más restrictiva que limita las posibilidades de que los migrantes ingresen al país y soliciten protección. Bajo estas nuevas normas, muchos migrantes deben demostrar que primero solicitaron asilo en otro país durante su tránsito hacia Estados Unidos, lo que dificulta que puedan presentar su caso en territorio estadounidense. Según estadísticas gubernamentales, esta política ha reducido drásticamente el número de migrantes liberados dentro del país mientras esperan el resultado de sus solicitudes.
Por otro lado, la cooperación con el gobierno de México también ha sido clave para controlar los flujos migratorios. Las autoridades mexicanas han intensificado los operativos para detener a migrantes antes de que lleguen a la frontera, especialmente en el sur de México, lo que ha contribuido a que menos personas lleguen a Estados Unidos.
En un comunicado enviado a CBS News, el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, destacó que estas medidas forman parte de un nuevo modelo diseñado por la administración Biden para equilibrar el cumplimiento de la ley con los valores humanitarios. “A través de medidas estrictas en nuestra frontera, capacidades recién construidas para remover personas más rápidamente y la creación de vías legales que permiten a las personas obtener alivio de manera segura y ordenada, hemos reducido los encuentros en la frontera por debajo de los niveles de 2019?, afirmó Mayorkas.