La investidura del nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, prevista para enero de 2025, no contará con ningún enviado especial de Rusia, ya que no está prevista la participación de delegaciones extranjeras en esta ceremonia, según el Kremlin.
“Para la investidura no está prevista la invitación de delegaciones extranjeras más allá de los embajadores acreditados en Washington”, afirmó a la prensa Yuri Ushakov, asesor de política internacional del presidente ruso, Vladímir Putin.
Según la agencia rusa TASS, el diplomático ruso, que entre 1998 y 2008 fue embajador de Rusia en EEUU, recalcó que los invitados extranjeros no participan en la propia ceremonia de investidura, sino en las actividades de protocolo vinculadas a esta.
Las relaciones entre Rusia y Estados Unidos, que comenzaron a deteriorarse en 2014 tras la anexión de Crimea y el apoyo ruso a los separatistas del Donbás, han tocado fondo por la guerra en Ucrania y el apoyo militar de Washington a Kiev.
Pese a ello, el Kremlin ha aseverado que no rebajará el nivel de su representación diplomática en EEUU e incluso anunció la candidatura de su próximo embajador en este país, Alexandr Dárchiev, un veterano diplomático de 64 años que encabezó la legación rusa en Canadá.
Se espera que la llegada de Trump a la Presidencia favorezca la reanudación de los contactos entre la Casa Blanca y el Kremlin.
Los analistas pronostican que el presidente ruso, Vladímir Putin, y Trump se reunirán en 2025, al igual que hicieron a mediados de 2018 en Helsinki, con el arreglo del conflicto en Ucrania en la agenda. EFE