Monseñor Moronta pidió de regalo de Navidad libertad para los presos políticos

Monseñor Moronta pidió de regalo de Navidad libertad para los presos políticos

Cortesía

 

“Nosotros escribimos cartas al Niño Jesús, pero el Niño Jesús está escribiendo una carta; que hagamos realidad la justicia y la paz en Venezuela”, dijo monseñor Mario Moronta, obispo de la Diócesis de San Cristóbal, durante la rueda de prensa para invitar al recibimiento de su sucesor, monseñor Lisandro Rivas.

Por: Luz Dary Depablos | Corersponsalía lapatill.com





Tras haber enfrentado un quebranto de salud por varias semanas, monseñor Moronta nuevamente se dirigió a los venezolanos y a los colombianos, aunque continúa recuperándose, asegura sentirse mucho mejor.

Aprovechó para pedir sus regalos de Navidad, “que convenzan en el corazón a cada uno de los factores políticos que componen a Venezuela, que nos den el ejemplo de sentarse a dialogar, para buscar sin insultos, sin descalificaciones y sin necesidad de leyes que vayan a perjudicar a aquellos que piensan diversamente de uno o de otro lado”, dijo.

Igualmente, expresó “así como los reyes trajeron regalos, nosotros en Venezuela y sobre todo aquellos responsables puedan regalar una Navidad feliz a tantas familias que tienen detenidos a sus seres queridos, por problemas de pensamientos políticos o por actitudes contrarias a la política, eso sería una cosa muy bonita”.

Por otra parte, exhortó a los venezolanos y a los colombianos, especialmente a los tachirenses, a defender la fraternidad de la integración, “no permitamos que nos vuelvan a cerrar la frontera, porque eso es un insulto a la inteligencia, pero además es una ofensa a la fraternidad. Nosotros somos herederos de Bolívar, de Santander, que aun con sus dificultades lucharon por la fraternidad de los pueblos”.

“Cuando tuvimos el cierre de las fronteras, fue una bravuconada, no se pensó en el mal que se le estaba haciendo, no a una relación política, sino a una vida del pueblo colombiano y venezolano, porque cuando uno vive aquí no entiende lo que entienden en Caracas y en Bogotá”, manifestó.

Asimismo destacó, “aquí no hay frontera, aquí hay una línea necesaria por razones geopolíticas, pero aquí no hay frontera, aquí lo que hay es una tierra de encuentro donde los venezolanos y los colombianos damos ejemplo de lo que es la integración, es verdad que algunos se portan mal de lado y lado, pero la mayor parte de los que vivimos en esta frontera, demuestran que aquí se viene es a trabajar”, resaltó

Recordó que aunque los puentes internacionales entre Venezuela y Colombia fueron cerrados, “la gente pasó por las trochas, porque más podía la voluntad, esa integración, que la decisión que se hubieran podido tomar”.

La Navidad no la decreta ningún gobernante

“En este momento todos somos testigos de la incertidumbre que se está viviendo (en Venezuela), yo preferiría no opinar muy puntualmente, porque hay muchos temas que son difíciles de tratar y de entender por las posturas de todos los miembros tanto de la oposición como del oficialismo”, dijo el obispo Moronta.

“Si nos preocupa y esto es parte de un tema que tuvimos en una reunión los obispos, es el manejo que se le está dando un poco al tema de la Navidad. Primero la Navidad no la decreta ningún gobernante. Las misas de aguinaldo no la decreta ningún gobernante, eso es una tradición antiquísima no solamente del pueblo venezolano, también del pueblo puertorriqueño y del pueblo filipino y que se ha extendido a otras partes y que viene de una tradición litúrgica, oficial, no es un invento del pueblo”.

A su juicio, lo importante es motivar a todos los venezolanos a una participación  activa para la construcción del país que se necesita. “Se necesita mucho diálogo, por eso invito de manera especial a los gobernantes, a la gente de la oposición, a la gente del oficialismo, a que nos den un ejemplo”, acotó.