El director del Centro Internacional de Derechos Humanos Justicia y Libertad, Dr. Miguel Méndez Fabbiani aseguró que los colaboradores de María Corina Machado están siendo víctimas de un programa sistemático de Terror de Estado aplicado por las agencias de inteligencia del régimen:
“El asedio del régimen tiránico a la embajada Argentina forma parte de lo que se tipifica como técnicas terroristas de “conmoción y pavor”.
El término “conmoción y pavor”, como subcategoría de la “dominación rápida”, es el nombre que se da a una intervención policial o militar diseñada para infundir terror en las mentes del adversario político.
Este inhumano asedio público y notorio constituye sin lugar a dudas una forma clásica de Terrorismo de Estado.
Los ciudadanos venezolanos que recurrieron al derecho internacional humanitario para resguardar sus vidas y su libertad, están siendo ilegalmente asediados por los violentos cuerpos represivos del régimen narcoterrorista.
Estos dirigentes políticos todos cercanos colaboradores de la líder nacional María Corina Machado, solicitaron a la República Argentina que se les garantizará el pleno asilo político en su Embajada, y por ello están siendo designados objetivo político-militar del narcoregimen castro-madurista.
El relator humanitario internacional que fue secuestrado por sus importantes denuncias contra el poder militar en Venezuela, declaró a los medios de comunicación reunidos las intenciones ulteriores del régimen narco-socialista que desgobierna en Venezuela:
“Señalamos a la opinión pública mundial que con esta gravísima despersonalización de facto, las vidas mismas de estos venezolanos inocentes están en serio riesgo mortal”.
Los líderes sociales que se resguardaron en esa dependencia diplomática están resistiendo física y psicológicamente un violento ataque híbrido perpetrado por los servicios secretos chavistas.
Los cortes premeditados del servicio eléctrico, la suspensión alevosa del servicio agua potable, la prohibición absoluta del uso del servicio de internet y los sobrevuelos de drones militares; son demostrativos de un plan bélico de cuarta generación orquestado para debilitar la moral de los libertarios asilados.
“Denunciamos que existe un proyecto tentativo en los despachos del SEBIN y la DGICIM de allanar por la fuerza esta invulnerable locación diplomática internacional.”
Vía NdP