Largas colas se registran en las agencias de Western Union en el estado Falcón, donde solo hay dos oficinas: una en el municipio Carirubana y otra en Miranda.
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Las inmensas filas evidencian que los falconianos siguen viviendo gracias a las remesas de familiares que se encuentran en otros países.
Aunque en diciembre las colas sobrepasan las 500 personas en espera de retirar 100 dólares en efectivo, esto es un pequeño porcentaje de la realidad de los falconianos que reciben remesas, ya que hay muchas opciones para hacerlo de otra forma sin que se pueda tener registro de ello.
Los ciudadanos pernoctan en las colas que se forman en las oficinas de Western Union, pues en temporada navideña aumenta demanda del servicio de remesas.
“Mis hijos son los que me mantienen. Antes me mandaban menos, pero la vida en Venezuela es cada vez más cara y ahora cada uno tiene que enviarme algo para poder hacer el mercado y eso que solo estamos mi esposo, un nietecito y yo. Sin hablar del gasto en medicinas para la tensión, la azúcar y todo lo que necesita uno cuando está viejo. En noviembre y diciembre es que se ha visto más cola aquí, hay muchas madres buscando su remesa para vestir a sus hijos y comprarles un regalito”, dijo Amanda Gutiérrez, de 63 años.
Por su parte, Migreidys Oropeza, de 27 años, llegó a la cola a las 3:00 am de este lunes 23 de diciembre para ver si puede sacar el dinero y comprar la ropa de dos de sus tres hijos.
“Mi esposo entró a Estados Unidos por la selva, ya tiene tres meses y gracias al trabajo que le sale a diario allá es que comemos. Tengo tres hijos y mensual necesito al menos 500 dólares solo para comprar comida, y hablo de darles una papa completa. Mis hijos están en pleno desarrollo y la comida es lo más importante”.
Aseguró que sale de recibir el dinero y va directo al mercado a hacer las compras, sino el dinero “se vuelve sal y agua”.
“Yo recuerdo que hace unos tres años, uno hacia un buen mercado con 100 dólares, ahora eso no alcanza para nada. En Venezuela, la comida aumenta a diario, todo aumenta a diario, y ni las remesas alcanzan. Yo doy tareas dirigidas para ayudarme porque un solo palo no da bollo”.
En 2023, se estima que Venezuela recibió alrededor de 3.000 millones de dólares en remesas. El monto promedio de remesas que se envían al mes es de 65 dólares.
En 2021, las remesas representaron el 5% del PIB. En 2023, las remesas representarían el 1,2% del PIB si se consideran las cifras estimadas.
Sin embargo, la inflación en Venezuela ha reducido el valor de las remesas. En los últimos 12 meses, la inflación en Venezuela alcanzó cerca del 400 %.
La mayoría de las remesas no entran por los canales formales, lo que deja un vacío en el registro final y real.